¿Quién debe ser llevado ante un tribunal eclesiástico? ¿El higúmeno skemamonje Serguéi o metropolitano Kirill?

27 de junio de 2020

Estimado metropolitano Kirill:

Nosotros, obispos de la República Checa, nos dirigimos a usted. Nos hemos enterado de su crimen contra Cristo y la Iglesia, y nos sentimos obligados a responder. La misma traición que usted comete, también es cometida por el Vaticano apóstata. Usted comparte el mismo espíritu que él.

Permítanos citar su página web eparquial: El 27 de abril, la eparquEkaterimburgo ía de adoptó una «decisión de privar al higúmeno skemamonje Serguéi del derecho a predicar y hablar en público».

Si usted no estaba de acuerdo con el contenido de los sermones o discursos del higúmeno skemamonje, debería haber indicado la herejía específica contra la fe o la moral que él había cometido y debería haber dado razones por las que contradecía el Evangelio y la Tradición Apostólica. Usted no dijo nada específico y, sin embargo, lo castiga.

Al oponerse públicamente a la voz profética que Dios da en este momento crítico para salvar a la Iglesia y a la nación, usted se ha delatado. Su apostasía interior de Cristo y Sus enseñanzas ha salido a la luz. Usted ha demostrado ser parte de un sistema que destruye activamente a quienes defienden la vida de la Iglesia y los fundamentos del Evangelio de Cristo y la Tradición Apostólica.

En el caso del padre Serguéi, usted no se opuso al hombre, sino a Cristo. El espíritu que abusa de la autoridad eclesiástica, a través de usted mata a un testigo de Cristo. Detrás de usted está el espíritu del anticristo. Usted ha cometido un triple crimen: se ha opuesto a Cristo, a la Iglesia —al Cuerpo Místico de Cristo— y también se ha opuesto al pueblo ruso.

Usted abre la puerta al espíritu de la muerte permitiéndole imponer un genocidio espiritual y físico sin obstáculos en este momento crítico. La maquinaria de globalización avanza de manera amenazante. El higúmeno skemamonje Serguéi se ha opuesto valientemente a ella. Por lo tanto, está llevando a cabo el ministerio profético en la Iglesia. Advierte mientras hay tiempo, y llama al arrepentimiento verdadero.

En lugar de cumplir con el deber de la Iglesia y proteger y apoyar la voz profética como obispo, usted ha demostrado ser un traidor a Cristo, Judas. De este modo, está preparando la destrucción del cristianismo y, en última instancia, de la nación rusa.

Estimado metropolitano Kirill, usted se opone a Dios mismo. En este momento, Dios ha dado un espíritu profético para salvar a la Iglesia. Usted lo está destruyendo, y esta actividad mortífera suya es la razón por la cual, según Ga 1, 8-9, Dios ha lanzado Su anatema —maldición— sobre usted.

Ahora está obligado a abandonar el obispado como apóstata. Pero si permanece en el cargo de forma obstinada y no canónica, acumula maldición sobre usted mismo, sobre los sacerdotes y los creyentes, y los arrastra hacia la destrucción eterna.

«La Iglesia ha sido edificada sobre el fundamento de los apóstoles y profetas» (Ef 2, 20). Estimado metropolitano Kirill, usted no ejerce el ministerio profético ni apostólico en la Iglesia. Y persigue a los que lo ejercen. Ha demostrado que no solo se ha excomulgado de la Iglesia, sino que también lucha contra la Iglesia.

Si no se arrepiente, en caso de que muera pronto, irá directamente al infierno como el apóstol traidor Judas. El higúmeno skemamonje Serguéi, los sacerdotes y los creyentes, si quieren ser salvos, ya no deben obedecerle, ya que es un rebelde obvio contra Dios.

La continuación de la cita de la página web de la eparquía de Ekaterimburgo: «… privar al higúmeno skemamonje Serguéi del derecho a predicar y hablar en público… es más consistente con la vida arrepentida de oración y soledad de un skemamonje».

Dios le ordena al profeta: «Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, declara a mi pueblo su transgresión y a la casa de Jacob sus pecados» (Is 58, 1).

Estimado metropolitano Kirill, usted dice hipócritamente que callar cuando Dios dice: «¡Clama!» es más consistente con la vida arrepentida de oración y soledad de un skemamonje. Esto es manipulación y su desobediencia a Dios.

La cita del decreto n.° 32 del 27 de abril de 2020: «Cuidando el bien de cada alma de los fieles hijos de la Iglesia de Cristo en la metrópoli de Ekaterimburgo, y sobre todo la piedad del clero sagrado dado a mí, humilde servidor, como asistentes en el ministerio apostólico, considero necesario, después de largas indagaciones y oraciones, dar varias órdenes a su reverencia, para que su servicio no sufra ningún daño».

Si realmente le importara el bien de cada alma… y la piedad del clero, apoyaría la voz profética del higúmeno skemamonje. Usted no se preocupa por el bien de las almas ni por la piedad del clero ni por Cristo. Esta declaración suya ha revelado que usted es un fariseo religioso que no tiene una pizca de autocrítica y destruye cruelmente la obra de Dios bajo el disfraz de frases piadosas. Lo siguiente se aplica a usted y a otros como usted: «Los tales son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es de extrañar, pues aun Satanás se disfraza como ángel de luz. Por tanto, no es de sorprender que sus servidores también se disfracen como servidores de justicia» (2 Co 11, 13-15).

La cita siguiente del documento: «Por lo tanto, cuidando la salvación de su alma eterna, deseando facilitarle el cumplimiento de sus grandes votos monásticos, es decir, renuncia a su voluntad y el silencio, le bendigo y le pido que acepta esta bendición en obediencia a la santa Iglesia y su divina Cabeza —Cristo— haciendo lo siguiente».

Estimado metropolitano Kirill, usted exige que un skemamonje renuncie a su voluntad no para cumplir la voluntad de Dios —lo que realmente hace fielmente, arriesgando su vida—, sino más bien para que se involucre en su traición y cumpla su voluntad —la voluntad de un apóstata— en lugar de la voluntad de Dios. El higúmeno skemamonje hizo sus votos a Dios y no a usted, un Judas. Él no debe obedecerle ni aceptar su pseudobendición, porque usted ha traicionado a Dios.

Cita del documento: «… en obediencia a la santa Iglesia y su divina Cabeza —Cristo—…».

Estimado metropolitano Kirill, le preguntamos a quién sirve y a quién obedece. ¿A Cristo o al diablo? Usted sirve al diablo como Judas y no tiene nada que ver con Cristo, así que no tome Su nombre en la boca porque comete el pecado de profanar el nombre de Dios. Usted sirve al sistema del anticristo, al sistema del Nuevo Orden Mundial (NOM). Ahora ha salido a la luz, estimado Sr. Nakonechny.

Al igual que el apóstol Judas, usted no tiene derecho a exigir obediencia en la autoridad de Jesucristo. Usted pertenece a esos sumos sacerdotes traidores que condenaron a Cristo a la muerte. Tiene el mismo espíritu que Anás y Caifás. De verdad utiliza hábilmente frases piadosas, pero detrás de ellas está el veneno de la serpiente del Edén. El diablo en el desierto, cuando tentaba a Cristo, incluso citaba la Palabra de Dios, tal como usted lo hace.

La cita del documento: «… siendo su arzobispo metropolitano, de quien deriva el derecho de realizar el servicio sacerdotal y predicar, desde ahora en adelante lo privo del derecho a enseñar, predicar y exhortar en sermones públicos o asesoramiento espiritual personal».

Estimado metropolitano Kirill, usted no es un obispo verdaderamente ortodoxo que deba ser obedecido. ¿Se da cuenta de que según Ga 1, 8-9 está bajo la maldición de Dios —anatema—? Nadie deriva el derecho de realizar el servicio sacerdotal ni de usted ni de otros falsos apóstoles. San Basilio escribe acerca de usted y de otros como usted: «Comercian con Cristo, y no reconozco como obispo a nadie que haya recibido la ordenación de estas manos impías… Huimos de ellos, los herejes, y lanzamos el anatema sobre ellos…».

Estimado Metropolitano, ¡es la maldición en lugar de la gracia lo que se transmite de usted, ya que está bajo el anatema de Dios!

La cita del documento: «No se le permite presidir ni concelebrar la Divina Liturgia, ni se le permite realizar otros deberes clericales públicos o privados o administrar los sacramentos».

Estimado metropolitano Kirill, esta prohibición se aplica a usted más que al higúmeno skemamonje Serguéi. Como usted es un hereje y apóstata, ya no se le permite presidir ni concelebrar la Divina Liturgia, ni se le permite realizar otros deberes clericales públicos o privados o administrar los sacramentos. Sus Liturgias, como las de un apóstata, son nulas e inválidas a la vista de Dios. Son un insulto a Dios y dañan a la Iglesia.

La cita del documento: «No se le permite escuchar confesiones ni en la iglesia ni en la celda».

Esta prohibición tampoco se aplica al padre Serguéi, sino a usted como hereje.

Cita del documento: «No puede abandonar el territorio del monasterio masculino de San Juan el Teólogo sin mi bendición escrita».

Estimado metropolitano Kirill, le recomendamos que, por causa de la salvación de su alma inmortal, abandone el cargo lo antes posible, ingrese en el monasterio masculino de San Juan el Teólogo y viva allí en penitencia hasta su muerte. De lo contrario, usted corre el riesgo de la condenación eterna como un apóstata público y endurecido.

La cita del documento: «Permítame recordarle la mandato de San Ignacio, portador de Dios: “… Sin el permiso del obispo, no está permitido bautizar o celebrar la Fiesta del Amor; por otro lado, todo lo que él aprueba es agradable también a Dios».

San Ignacio fue arrojado a las fieras en Roma porque permaneció fiel a Cristo. Usted, estimado metropolitano Kirill, no tiene nada en común con San Ignacio, portador de Dios, sino más bien con las fieras. ¡Lo que usted aprueba —la destrucción de un profeta— no es agradable a Dios, sino al diablo!

La cita del documento: «Por lo tanto, como su obispo, le bendigo para que sirva a la santa Iglesia en el silencio, soledad y oración, que tanto faltan en el mundo turbulento y desordenado de hoy. Es lo que ha elegido para usted al recibir el gran skema monástico».

Bendecir el silencio cuando es necesario advertir contra la muerte masiva y contra el camino al infierno es realmente la «bendición» del mismo diablo. ¡Y disfrazarse instando a alguien a orar es una muestra de hipocresía asquerosa!

La cita del decreto n.° 41 del 26 de mayo de 2020: «Se le prohíbe realizar el ministerio sacerdotal y se le priva del derecho a llevar una cruz en el pecho hasta el fallo de la corte eparquial».

Todos sus decretos y órdenes, estimado metropolitano Kirill, carecen de fuerza y no otorgan ninguna validez, ya que usted, como hereje, es excomulgado de la Iglesia y ya no tiene derecho a usar insignias episcopales.

La cita del veredicto n.° 4 del 15 de junio: «Dado que el higúmeno skemamonje Serguéi leyó un texto previamente preparado que no tenía nada que ver con la naturaleza de las acusaciones presentadas, y luego abandonó precipitadamente la sesión del tribunal eclesiástico eparquial sin responder a cuestiones claves, el 26 de junio se llevará a cabo otra sesión».

El higúmeno skemamonje actuó sabiamente, se pronunció claramente sobre el asunto, y no tenía sentido esperar sus comentarios farisaicos o veredicto prefabricado; de todos modos, su veredicto carece de fuerza, tanto ante Dios como ante la Iglesia. No compareció ante el tribunal la próxima vez y anunció al público que fueron ustedes (Kirill Nakonechny y Kirill Gundyaev) quienes deberían ser llevados al juicio por crímenes graves contra Cristo y la Iglesia.

La continuación de la cita del veredicto: «Expresamos la esperanza de que el higúmeno skemamonje sea capaz de encontrar la fuerza espiritual para una conversación directa y sincera durante ese período, de reconsiderar su actitud hacia su conducta, de volver sobre sí y enmendarse».

Todos los ortodoxos sinceros, no solo de Ekaterimburgo, expresan la esperanza de que usted, estimado metropolitano Kirill, renuncie a su cargo lo antes posible, porque ya no es suyo.

Preguntamos: ¿Quién defiende a Dios y Sus intereses? ¿Usted, un apóstata y hereje, o el higúmeno skemamonje Serguéi? ¡Es el higúmeno skemamonje Serguéi quien defiende los intereses de Dios! ¿Quién sufre, es perseguido y corre el riesgo de ser encarcelado o incluso perder la vida por la verdad de Dios? ¿Usted o el higúmeno skemamonje Serguéi? ¡Es el higúmeno skemamonje Serguéi! ¿Quién debería enmendarse? ¿Usted, un traidor a Cristo, o el higúmeno skemamonje, quién defiende a Cristo? ¡Es usted, estimado Kirill, quien debe enmendarse!

La cita del gabinete de prensa de la eparquía del 17 de junio de 2020: «La eparquía pide oraciones para que el higúmeno skemamonje Serguéi vuelva sobre sí y use el tiempo que se le ha dado para arrepentirse y enmendarse hasta la próxima sesión del tribunal eclesiástico».

Estimado Sr. Nakonechny, ¿es usted consciente de la cuestión fundamental de cuál es la situación actual? ¡La existencia de la Iglesia y la nación rusa está en juego! ¿Qué usted está haciendo por su salvación? Nada, y lo que es más, está haciendo exactamente lo contrario: busca destruir a quien incluso arriesga su vida por salvar a las almas inmortales y al pueblo ruso. ¡Usted, estimado metropolitano Kirill, es un triple asesino: asesino de Cristo, asesino de la Iglesia, asesino del pueblo ruso!

 

+ Metodio OSBMr                 + Timoteo OSBMr

obispos secretarios del Patriarcado católico bizantino